El hummus es de origen árabe, pero desde el Mediterráneo se ha extendido por todo el mundo y es frecuente verlo en los supermercados, pero es tan sencillo de hacer… no te prives de darle tu toque personal. Es un plato fantástico para comer legumbre en época de calor, también es ideal como plato para compartir o en un picoteo.
Ingredientes:
Garbanzos cocidos, ajo, aceite de oliva virgen extra, pimentón de la Vera, tahín (puré de sésamo), zumo de limón, el agua de los garbanzos o caldo de verduras y sal.
Nota:Si no dispones de tahín puedes prescindir de él, aunque le da un sabor muy rico. Yo en ese momento no lo tenía y lo sustituí por aceite de sésamo (este último hay que añadir muy poco pues tiene un sabor muy intenso).
Preparación:
1º – Trituramos los garbanzos cocidos con el ajo, el zumo de limón, la sal y el tahín (que se puede prescindir de él si no se tiene, pero le da un sabor especial) e ir agregando agua o caldo de verduras según se necesite hasta que sea una pasta tipo puré.
2º – Servir en un plato llano extendiéndolo bien pero creando una pequeña montañita en el centro. Agregar pimentón molido (si es pimentón de la Vera mejor) por encima al gusto y con aceite de oliva virgen extra.
Yo lo suelo servir con el pan árabe tostado, pues queda muy crujiente, pero también está muy rico con palitos de zanahoria, por ejemplo.
Nota: no he puesto cantidades porque va en gusto, si te gusta más espeso o más fuerte de sabor con más ajo. Yo pongo 250g de garbanzos cocidos por un ajo y el zumo de 1/2 limón.
