Quiche o tarta salada, la más famosa de estas tartas es la quiche Lorraine (con nata y panceta ahumada), pero he sustituido el relleno por otro menos graso; y ha quedado muy rica y jugosa. Esta preparación resulta ideal para reuniones, comidas con amigos, familia,…
Ingredientes 8 o 10 raciones:
- Base de empanada o masa brisa
- Una cebolla grande
- 200 grs. de espinacas (pueden ser congeladas)
- Medio vaso de caldo o agua
- 4 huevos grandes
- Una tarrina de ricotta (puede ser requesón o similar)
- 50g queso rallado para gratinar
Elaboración:
Primero, preparamos el relleno: Sofreímos la cebolla cortada en tiras o en trozos, no hace falta que sean muy pequeños. Añadimos sal y dejamos que se doren a fuego fuerte.
Cuando estén los trozos dorados así aproximadamente…
…añadimos las espinacas.
A continuación, añadimos el caldo o agua y dejamos cocinar a fuego medio.
Cuando el agua se haya evaporado, apagamos el fuego y dejamos reposar esta preparación.
A continuación batimos los huevos y añadimos el queso ricotta. No añado más sal, pues el queso está salado.
Después añadimos la preparación anterior y mezclamos.
En un recipiente apto para horno, ponemos la masa en la base, previamente engrasada y enharinada para que no se pegue al molde.
Pinchamos la base con un tenedor y añadimos el relleno.
Espolvoreamos con el queso rallado, repartiéndolo bien por toda la superficie del relleno.
Introducimos en el horno, precalentado arriba y abajo a 180ºC, durante unos 35-40 minutos. Dependiendo del horno, hasta que veas la masa dorada y el queso gratinado. Poner la bandeja del horno en la mitad o en la siguiente hacía abajo. Si la pones muy arriba, puede que se quede la masa poco hecha.
Así me quedó…
Es una preparación muy fácil y versátil, pues puedes ir cambiando los ingredientes del relleno.
Puedes tomarla caliente o fría, si te ha sobrado de un día para otro. Eso sí, guárdala en la nevera.